Burmés. El gato amoroso y gran compañero

ORIGEN E HISTORIA

Más de 500 años marcan la historia de este gato. Según algunas teorías, se trata de un felino proveniente de los monasterios birmanos, mientras que otras ubican su origen en Tailandia.

No obstante, el establecimiento de la raza como se conoce hoy ocurrió en Estados Unidos.

Fue el Dr. Thompson, psiquiatra militar birmano, quien comenzó en 1930 el desarrollo del actual gato Burmés. Tomó una gata traída desde Birmania, la cruzó con un Siamés Seal Point y a partir de su descendencia continuó ligando hasta lograr la pureza.

La Cat Fanciers' Association (CFA) reconoció la raza oficialmente en 1953 y desde entonces se volvió muy requerido en Estados Unidos y Europa. Se conocen las variedades Burmés americano e inglés.

CARACTERÍSTICAS

El cuerpo del gato Burmés tiene una musculatura compacta que puede pesar hasta seis kilos en los machos y cinco en las hembras. Tiene el cuello corto y muestra una cabeza redondeada, con hocico corto, nariz ancha y orejas redondas bien separadas.

Los grandes y brillantes ojos de este minino —colores amarillos o dorados— están separados y reflejan gran expresividad. La cola es recta, de tamaño moderadamente largo y punta redondeada.

Un pelaje muy corto, fino y adherido al cuerpo cubre al gato Burmés, que resulta brillante a la vista y sedoso al tacto. En un principio eran solo de color marrón, pero en la crianza se han producido también azul, chocolate, crema, lila, rojo y tortuga.

CARÁCTER Y COMPORTAMIENTO

Un gato elegante y atlético tendrás en tu casa con un Burmés. Se han popularizado como mascotas porque les encanta jugar y son amistosos, inteligentes y cariñosos. Se relacionan fácilmente con extraños y conviven en armonía con perros, pero no con otros gatos.

Como no le gusta la soledad, este felino necesita que su dueño siempre esté pendiente de él; no se recomienda dejarlo solo durante mucho tiempo. Siempre estará buscándote para jugar y te protegerá, tanto así que ni siquiera saca las garras.

El gato Burmés ha desarrollado buenas dotes de cazador y muestra una vitalidad sorprendente. Por su gran longevidad, con esta raza tendrás garantizado un compañero por hasta más de 16 años. Nada mal.

CUIDADOS

Para la alimentación de esta raza deben preferirse las proteínas. Les gusta comer muchas veces al día, por lo que se recomienda tener siempre disponible un recipiente con comida y agua fresca. Pueden vivir sin problemas en sitios cerrados.

Con respecto a otros cuidados, el gato Burmés no exige nada fuera de lo común. Puedes cepillarlo una vez a la semana y bañarlo mensualmente o cuando haga falta. No son amantes del frío, por lo que debes procurar un ambiente cálido para su crianza.

Esta raza presenta una excelente genética que los protege de enfermedades. Sin embargo, se sugiere mantenerlo en control con el veterinario para que le aplique las vacunas que lo mantengan fuerte.

DÓNDE COMPRAR UN GATITO BURMÉS

Asegúrate de conocer lo básico de esta raza antes de comprar un ejemplar de gato Burmés para que no seas estafado. Prefiere siempre criadores o vendedores certificados que garanticen un felino saludable.

No te dejes llevar por fotos de tiendas en internet. Mira el gato con detalle, tócalo y siente su vitalidad. No es fácil conseguir esta raza en España, pero puedes contactar al criadero Bellabonny (Islas Baleares).

VIDEO GATO BURMÉS

Aquí podrás observar un preciso gato burmés color negro mientras es paseado con la correa.